ORTIZ MOYA, JOSÉ
(Murcia, 1932). Comienza a dibujar a los 16 años, trabajando como ayudante del autor de “El Guerrero del Antifaz”, Manuel Gago. Su primera obra es “El Espía”, serie de cuadernillos de la editorial Maga. Durante el año 1951, tras este buen comienzo, se traslada a Valencia, donde compartirá estudios junto a su hermano Leopoldo y otros profesionales del tebeo, como Luís Bermejo o Miguel Quesada. Es por este motivo por el que su nombre quedara ligado a la denominada Escuela Valenciana.
Entre sus series destacan “El Capitán don Nadie” (1952), “El príncipe Pablo” (1953), “El Duque Negro” (1957), etc. A finales de los años 50, comienza su colaboración con Toray y la poderosa Bruguera.
A partir de 1960, su trabajo se dirige, también, más allá de nuestras fronteras. A través de la agencia Bardon Art crea historias de tema bélico, especialmente, y consigue dibujar una tira diaria para el Daily Express.
Tras doce años de trabajo para los Estados Unidos, decide centrarse en el mercado nacional realizando una obra más personal. En la década de los 80, le proponen realizar su producción directamente para el mercado español. Es en este momento cuando es reconocido pro la afición, como uno de los mejores autores españoles de estilo fuerte y realista, pero no exento de desenfado y humor.
En 1982, pasa a ser coeditor de la editorial Metropol junto a otros autores. Esta trayectoria resulta muy corta. Publican tres revistas; Metropol, Mocanbo y KO cómics.
En 1992, con motivo de los eventos del V centenario y en la fastuosa colección “Relatos del Nuevo Mundo”, dirigida por Pedro Tabernero, crea sus dos últimas obras para el mercado español; “La civilización Inca” y “Orígenes del Hombre Americano”.
Durante la segunda mitad de los años ochenta, las revistas y editoriales españolas sufren un declive hasta quedar en una situación precaria. Ortiz opta por orientar, en exclusiva, su trabajo hacia el mercado exterior italiano.En 1998, la asociación de Amigos del Tebeo de la Región de Murcia le concedería el premio “Parapajote de Oro” a su labor profesional.