MARTÍNEZ OSETE, JUAN ALEJANDRO
(Totana, Murcia, 17 de Julio de 1921 – Barcelona, 2000). Dibujante y Guionista. Historietista afincado en Barcelona desde 1943. En 1944, realiza su primera publicación en la revista “Hola”. Después de esto publica otros en la revista infantil “Atalaya” y en “TBO”
De obra ingente, no sólo autor sino también como entintador de seriales ajenos de firmas como Ambrós (en 1949, “El Jinete Fantasma”), Darnís “el Jabato”, Ferrando “El Diablo de los Mares” o “Zarpa de León”, entre otros.
En 1945 crea la serie “Rex Dixon” para la editorial Fantasio, con la que también crearía “Cuento de Hadas” y “Kid Martin”.
En 1947 empieza a trabajar para la editorial Toray, realizando dos series, “Yelmo Negro” y “El Silencioso”
En 1948 colabora con la editorial Grafídea y realiza “la Máscara de los Dientes Blancos”, acaba la serie “Mascarita”, iniciada por el dibujante Pedro Alférez.
En 1950 comienza su relación con la editorial Marco, muy fructífera, ya que trabajó con ellos durante trece años. Allí crearía series tan importantes como “El Puma”, “Castor el Invencible”, “Rex Dixon”, “Simba Kan” o “Lucha de Razas”, entre otras, además de muchas páginas en revistas de humor y aventuras de temática variada.
Durante todos estos años, como tantos otros autores, realizaba infinidad de trabajos para las editoriales del momento. Tras varios intentos de la editorial Bruguera para incluirlo en su equipo, poco fructíferos ya que no le interesaba al autor por el excesivo trabajo que manejaba, a finales de 1960 decide aceptar y, tras poco más de un año le asignan la creación de las aventuras de “el Capitán Trueno”. A partir de aquí su obra se multiplica con infinidad de personajes y series como “Víctor, héroe del espacio”, “Comandos de África”, “el Jabato”, etc.
Será en 1975 cuando pase a ser dibujante de la plantilla con dedicación exclusiva al dibujo cómico, realizando personajes como “Durand y Dupont”, “Jeremías” o “Boy”. También entintó cientos de páginas de personajes de otros autores como “Mortadelo y Filemón” de Ibáñez, llegando a realizar páginas completas de los mismos, y de otros como “Pepe Gotera y Otilio” o “El Botones Sacarino”, sin llegar a firmarlas nunca, pero aportándoles un estilo muy reconocible. Con el cierre de Bruguera en 1986, Martínez Osete se retira del oficio de dibujante de manera radical.